Muestra del funcionamiento del ensayo
Rockwell. El penetrador precarga, luego
carga, y luego descarga; la relación
entre la precarga más la carga y la
descarga indica la dureza del material.
La
dureza Rockwell o ensayo de dureza
Rockwell es un método para determinar la
dureza, es decir, la resistencia de un
material a ser penetrado. El ensayo de dureza
Rockwell constituye el método más usado para medir
la dureza debido a que es muy simple de llevar a
cabo y no requiere conocimientos especiales. Se
pueden utilizar diferentes escalas que provienen de
la utilización de distintas combinaciones de
penetradores y cargas, lo cual permite ensayar
prácticamente cualquier
metal o
aleación. Hay dos tipos de penetradores: unas
bolas esféricas de
acero endurecido (templado y pulido) de 1/16,
1/8, ¼ y ½
pulg, y un penetrador
cónico de
diamante con un ángulo de 120º +/- 30' y vértice
redondeado formando un casquete esférico de radio
0,20 mm (Brale), el cual se utiliza para los
materiales más duros.
El ensayo consiste en disponer un material con
una superficie plana en la base de la máquina. Se le
aplica una precarga menor de 10 kg, básicamente para
eliminar la
deformación elástica y obtener un resultado
mucho más preciso. Luego se le aplica durante unos
15 segundos un esfuerzo que varía desde 60 a 150 kg
a compresión. Se desaplica la carga y mediante un
durómetro Rockwell se obtiene el valor de la
dureza directamente en la pantalla, el cual varía de
forma proporcional con el tipo de material que se
utilice. También se puede encontrar la profundidad
de la penetración con los valores obtenidos del
durómetro si se conoce el material.
Para no cometer errores muy grandes el espesor de
la
probeta del material en cuestión debe ser al
menos diez veces la profundidad de la huella.
También decir que los valores por debajo de 20 y por
encima de 100 normalmente son muy imprecisos y
debería hacerse un cambio de escala.
El cambio de escala viene definido por tablas
orientativas, puesto que no es lo mismo analizar
cobre que
acero. Estas tablas proporcionan información
orientativa sobre qué escala usar para no dañar la
máquina o el penetrador, que suele ser muy caro.